martes, 22 de enero de 2008

Y aún recuerdo...


Y tu voz ya se ha perdido.
No la puedo escuchar...
Entre las sombras que me olvidan
Tampoco te veo...
Y permanezco sólo y temeroso,
y lloro como un niño...


Y aún recuerdo la primera vez que deseé besarte, fue sólo una idea fugaz que cruzó mi mente, pero sólo fue eso, la primera… Algo que tú habías logrado que yo sintiera en mi más profunda oscuridad…
Aún recuerdo tus palabras… El mágico sonido de tu voz despertándome de un tortuoso letargo y devolviéndome la vida…
Aún recuerdo cada instante de ternura, cada palabra de cariño y de deseo que surgían de tu alma…

Aún recuerdo las ilusiones que generaste en mí…

Aún recuerdo tus letras, que permanecen grabadas en mi más profundo sentir…

Aún recuerdo que comencé a amarte, sin darme cuenta, envuelto en tí, en tu calor, en tu cariño, en tu bondad…

Aún recuerdo que desapareciste, sin explicaciones, sin una sola palabra…

Aún recuerdo que nunca te pedí nada… Tan solo un abrazo y un beso…

Aún recuerdo que nunca me lo diste… Quizás no tuvimos tiempo…

Nunca entendí qué ocurrió, ni porqué… Sólo sé que un día entraste en mi vida y que no quería que salieras de ella porque comenzaba a amarte…


Y hoy ya no pido nada...


Black Roses for the Death...

1 Comments:

Blogger tristezassinti said...

me gusta como escribes, tu alma negra y desgarrada. Ojala todo hubiera sido distinto.

23/1/08 11:33 a. m.  

Publicar un comentario

<< Home