Soñar...

“En mis hijos quiero reparar el ser hijo de mis padres:
y con todo el futuro quiero reparar así mismo este presente”
(Also Sprach Zarathustra. F.W. Nietzsche “Del país de la civilización”)

Una cerveza y unos cuantos cigarrillos bajo la luz de la luna… Ayer necesitaba pensar con las estrellas como testigos, y eso es lo que hice…

Una ligera brisa acariciaba mi rostro…

¿Eras tú…?

Dos billetes de tren en mis manos me recordaron que “el momento” está muy próximo… Y eso me alegraba y me asustaba…

Y abrí los ojos para soñar…

Y traté de llegar lo más lejos posible…

Soñar con los ojos, vivir una vida esperando… Y una canción de amor a lo lejos… toca para mí… La melancolía que bañó su alma en paisajes de seda, entre jazmines y mariposas, en romántica comunión…

Un momento… Un instante de mi soledad infinita que duele…

Y ayer, volví a necesitar un abrazo…
Y una palabra…
Y una sonrisa…

Quiero centrar mi vida… Necesito creer en un futuro real, no imaginario…

¿Me ayudarás tú…?

Futuro...

Se acerca el momento de enfrentar una situación y muchas son las expectativas que tengo depositadas. No sé como resultará, pero desde el primer momento sé que debía hacerlo, que me lo debía a mí y también a ella… Es la única manera de comprobar qué es lo que existe entre nosotros, es la oportunidad que debemos darnos…

Muchas horas para conversar, para comprobar que ocurre o puede ocurrir en nuestras vidas, y una proposición en firme para el futuro…

El tiempo lo dirá todo…

Llevo algunos días pensando en alemán… ¿Por qué será…?

Ich hab’ mich verliebt,
und zwar in Dich.
Für mich bis dud as beste der Welt,
und das ist das einzige,
was zählt.
Sanfte Küsse,
Dich zärtlich berühren.
Ich wünschte,
ich könnte Dich immer spüren.
Ich hofte, Du fühlst das gleich für mich,
weil sonst mein Herz zerbricht.

“Te creo capaz de todas las maldades: por eso
quiero de ti el bien”.
(Also Sprach Zarathustra. F.W. Nietzsche “De los sublimes”)

Amor und Psyche

Amor und Psyche

Ein Seufzer, der von Mund zu Munde fliegt,

Wann Seele sich zur Seele innig schmiegt;

Des Herzens Übergang, wann leis' und still

Der Liebe Wort zum Wort nicht werden will;

Das Wort, das nicht zum Worte werden kann;

Verschwiegen schauen sich zwei Seelen an,

Und schöpfen in der Gottheit reinstem Quell

Und fassen sich im Blicke zart und hell;

Der Atem, der das Leben süß verlängt,

Der Hauch, in den sich Geist und Körper drängt,

Ein Augenblick, der Ewigkeit Genuß,

Der Engel reinste Wollust ist - ein Kuß.

(Johann Gottfried Herder"Italienische Reise")

Sólo espero que el tiempo transcurra mucho más rápido de lo habitual...

Frío...

“En ti vive lo irredento de mi juventud: como
juventud te has sentado a aguardar esperanzada,
sobre amarillas ruinas de sepulcros”
(Also Sprach Zarathustra. F.W. Nietzsche “El canto de los sepulcros”)

“¡Yo tengo que ser combate y devenir, y finalidad,
y contradicción de los fines!. ¡Ay, quien comprenda
mi voluntad comprenderá también las sendas
tortuosas por las que tengo que caminar!”
(Also Sprach Zarathustra. F.W. Nietzsche “De la superación de sí mismo”)

Y ayer por la noche volví a llorar...

Supongo que es algo normal...

O no...

Ya no lo sé, y tampoco sé si me importa realmente...

Supongo que son momentos, tan sólo eso....

Sólo me queda esperar. Una semana puede pasar o muy rápida o terriblemente lenta...

Apenas salen hoy mis palabras...

Continúo bloqueado...

Y ahora debería ser distinto...

El destino...

"Aprendí a caminar y desde entonces no corro. Aprendí

a volar, y desde entonces no tolero que me empujen

para pasar de un sitio a otro".

(Also sprach Zarathustra. "Del leer y escribir")

El destino...

Siempre he creido que no existía, al menos para mí...

Ahora, pasado un tiempo y viendo cómo es el devenir de mi vida, creo que el destino me espera... Al menos creo que le debo una oportunidad...

Y voy a tentar al destino... Lo he decidido...

Escuchar de nuevo una voz, una risa... Son situaciones que me llevan a pensar que, quizás, no debo dejar pasar algo que me emociona... No sé si será bueno o malo, y sé que tengo miedo, que me dá miedo dejarme llevar por esa situación, pero también sé que debo intentarlo y que esa será mi oportunidad para comprobar si es cierto...

He decidido dar un paso adelante...

Y siento miedo...

Pero este miedo es distinto...

Decisiones…

"Solamente cuando hayais renegado todos de mí,

sólamente entonces volveré entre vosotros. En verdad, con

otros ojos, hermanos míos, buscaré yo entonces a

mis ovejas perdidas; y entonces os amaré con otro amor".

Also sprach Zarathustra, I. "De la virtud dadivosa")

Tiempo… Este tiempo que se consume poco a poco y ahoga o reaviva las cenizas…

Decisiones por tomar y sin saber hasta qué punto son correctas o no…

Tener miedo, pero sabiendo que es la única forma de avanzar… Es la única manera de eliminar todos esos temores…

Y necesitaré un abrazo…
Y no sé si lo tendré…

Y no sé si sufriré…

Pero sé que debo intentarlo…

Y mientras tanto, continúo bloqueado...

Necesito respirar... ¿Alguien me regala un poco de aire?

Tiempo de cambios...

Otra noche sin dormir…

Cuando las cosas se tuercen, se tuercen de verdad, independientemente de que se actúe de una forma u otra…

Ayer por la noche, cientos de sentimientos me llenaban. Un absoluto caos de sensaciones y pensamientos dispares ocupaban mi ser por completo…

Supongo que es lo que toca ahora, en este momento…

Necesito seguir desconectando y quizás debo visitar un lugar donde tratar de recuperar algo que puede ser importante, algo que, en un momento, dejé atrás y ahora ha llegado el momento de recuperar definitivamente…

Y necesitaré una sonrisa…
Y necesitaré una mirada cómplice…
Y necesitaré un abrazo…
Y necesitaré un beso…
Y necesitaré entregarme por completo…
Y quizás lo haga…

Necesito olvidar lo que nunca he tenido y recuperar lo que perdí…

Noche, noche enlutada que vienes a visitarme
y con tu mano de seda recoges mi llanto de cristal…
¿Iluminarás con el resplandor de las estrellas
que en tu seno duermen,
la oscuridad que envuelve mi corazón roto y abandonado?

Sin darme cuenta...

La vuelta a Madrid, tras tres días para recordar, resultó realmente dolorosa. Las cosas están donde estaban, es decir, que no sé dónde están… No sé realmente que ocurre con mi vida desde hace algún tiempo. No sé hacia dónde me lleva ni sé hacia dónde me dirijo...

Y lo único que sé es que no puedo continuar así…

He vuelto a tender mi mano para ayudarte, pero no lo haré más… Quiero hacerlo, pero, aunque lo sabes, no quieres que te ayude…

Y no lo entiendo…

Esperaré, pero ya sin esperar nada… Ya me he dado cuenta…

Sin darme cuenta me fui enamorando de ti…
Sin darme cuenta, fui necesitando tus palabras, tus miradas, tu sonrisa…

Sin darme cuenta, necesitaba tus abrazos, tus caricias, tus besos en el cuello...
Sin darme cuenta, me fuiste alejando de ti…
Sin darme cuenta, creo que debo apartarme…

Y cuando te necesité, no te tuve…
Y cuando necesité ayudarte, tampoco me dejaste…
Y cuando, quizás, me necesites, ya no estaré…

Sé que te quiero... Sé que me entregaría a tí sin reparos, sin miedos... Pero ahora tengo miedo al dolor de esta soledad y al desprecio...

“El pensamiento del suicidio es un gran consuelo,

ya que por medio de él se logra

escapar de una mala noche”

(F. W. Nietzsche)

¿Olvidar?

Escuchando: “Je te rends ton amour”. Mylene Farmer

Sólo sensaciones sin apenas sentido surgen de mi mente. Me siento cada día más bloqueado…

Estaré toda la semana lejos de todo…

Me vendrá bien para tratar de ir olvidando…

Ayer, mi domingo fue salvado del hastío y del vacío con que me lleno cada fin de semana… Necesito hablar para sacar todo lo que hay en mí, y ayer me vino bien poder hacerlo…

Porque los fines de semana me destruyen…

Y se me ocurren cosas raras y sin sentido…


…Cuando alguien muere, no lo pierdes de repente, sino a trocitos… Como cuando alguien deja de escribirte… Poco a poco le vas olvidando y va desapareciendo de nuestros recuerdos, por más que nos prometamos a nosotros mismos que eso nunca sucederá… Pero la vida es traicionera y no entiende de promesas…


Ojala conociera el truco para demorar el miedo a la soledad...

Y una lágrima resbala por la mejilla… Y los ojos se cierran…

Quisiera permanecer para siempre en el reino de Morfeo…

Y seguiré amándote aún el día que ya no te quiera...

Y ayer, de nuevo, necesité tu abrazo…


Pregunta del día: ¿Qué se siente cuando se olvida a alguien?



“Y si un amigo te hace mal, dile: Te perdono

el daño que me has hecho. Pero,

¿cómo podría perdonarte el mal que te has hecho a ti?”

(F. Nietzsche. Also sprach Zarathustra. “De los Misericordiosos”)

Un sueño...

"Vosotros miráis hacia lo alto cuando
queréis elevaros. Yo miro hacia abajo,
porque estoy en las alturas.
¿Quién de vosotros puede reír y mantenerse
al mismo tiempo en las alturas?.
Quien escala las más elevadas montañas
se ríe de todas las tragedias, de la escena
o de la vida real."
Zarathustra, I, “Del leer y escribir”

…Me miras desde detrás de esos cristales que hacen de tu mundo un lugar mucho más solitario y triste… Me fijo en ti tras sentir ese aliento cálido con el que secas el sudor de mis sienes… En tu mirada baja hay un deseo, un hueco donde poder refugiarse y sentirse a salvo a tu lado…

…Me miras desde detrás de esos cristales por donde quisiera pasar… Me miras desde detrás de esos cristales donde escribo con mis labios dos simples palabras, con las que baño el sentimiento más profundo, el deseo más intenso y loco por ti…

Te amo…

Anoche...

Ayer por la noche una extraña sensación me invadía por completo. Tardé mucho en iniciar las tres horas escasas de descanso que he tenido… Una mezcla de preocupación, dolor, miedo y esperanza. Realmente traté de mantener mi mente en blanco, para no tener que pensar en nada. Dejé que el aire golpeara mi rostro y alborotara mi pelo… Dejé que el negro manto de la noche me cubriera.

Y di un paseo…

Paseé junto a mi soledad…

Con el único techo de las estrellas, jugué a identificarlas, como cuando era pequeño… Ya han pasado demasiados años, pero sentí lo mismo que sentía cuando jugaba con mis hermanos a ver quien era capaz de descubrir más constelaciones o buscar formas extrañas en esos pequeños grupos de luces…

Y busqué una estrella fugaz que cruzara “mi cielo” para pedir mi deseo…

Y me sentí solo…

Y sentí de nuevo el miedo a la soledad…

Y ayer, por la noche, sentí frío…

Y a veces, el frío me hace sentirme vivo…

Y lloré…

Y ayer por la noche releí “El Principito”…

Y hoy he vuelto a comenzar a releer “Also sprach Zarathustra” de F. Nietzsche… Y me encanta…

Y algún día espero poder tener a mi niña entre mis brazos…

Y una vez leí algo que decía así: “Lo que hacemos por nosotros mismos, muere con nosotros mismos. Lo que hacemos por los otros, permanece y es inmortal…”

Y quizás sea cierto…

Y nunca podremos saberlo…

Y yo te esperaré...

Esperaré...

A veces, cuando todo parece que se ha acabado, surge una extraña luz que ilumina ese retazo de vida que permanece...

Me dices que no es el mejor momento de tu vida y estás un poco confusa...

Te he tendido mi mano... Te he ofrecido mi ayuda, mi apoyo... Ahora ya eres tú quien decides... Yo ya no puedo hacer más... Ójala pudiera hacerlo, pero la decisión ya no es mía. Supongo que necesitas tu tiempo...

No estás sola… Yo voy a estar ahí, porque quiero estar ahí, porque debo estar ahí y porque tú lo necesitas…

Y en mis sueños, yo te abrazaré a tí...

Volveré a buscarte…
Cuando sientas que no estoy,
Cuando sientas que nadie te quiere
Cuando nadie viva en tu piel.
Cuando tus besos se sequen por no darlos
Cuando la distancia te venza,
Cuando no puedas soñar
Cuando sólo veas vacío,
Cuando el futuro se convierta en presente,
Cuando quizás no sepas de mí,
Cuando te sientas olvidada…
Entonces yo, y sólo yo,
Estaré a tu lado…

Sólo pedí que me quisieran...

De nuevo tengo la terrible sensación de haber perdido muchas de las pocas y pequeñas cosas que quedaban en mí. Aunque bloqueado, todavía soy capaz de sentir demasiadas cosas. El dolor continúa bloqueándome. He estado al borde de muchas cosas y aunque el miedo nunca me ha abandonado, sé que el límite está muy cerca… El tiempo, mi tiempo, puede acabarse en cualquier momento… Y el silencio siempre es malo, porque causa demasiado dolor…

Quizás ya es hora de tener mi propio espacio en blanco…

Me obligué a ser mejor. Debería ser muy fuerte, quería serlo, pero cada día que pasa me siento más débil, más vulnerable… Y la herida sangra de nuevo... Las palabras se han apagado cuando parecía que necesitabas mi apoyo... Unos mensajes que daban luz a mi esperanza y que terminan en el silencio o en una cierta indiferencia...

Me pediste que no te ignorara, y eso hice... ¿Por qué todo se ha vuelto al revés?. Te pedí que no hubiese silencio y es lo que he tenido. ¿Qué ha pasado?.

Y ayer, de nuevo, me fue imposible dormir…

Saber que ni siquiera soy un recuerdo para ti, me hace sentirme mal…

Sólo te pediré un favor… Recuerda el principio y el intermedio de “nuestra relación”… No hay final…

Y ahora dame tu mano…

Y ahora, dame por última vez un abrazo…

Gracias…

- “Yo sólo pedí que me quisieran, no que me volaran el corazón a base de balazos silenciosos” –

Ya no volveré a pedir nada

Estos días que han pasado han resultado duros y las lágrimas han vuelto… Ver la realidad que me rodea me ha hecho darme cuenta de la soledad que ahora mismo vivo en mi vida. De nada sirven los recuerdos de momentos de un tiempo tan pasado como casi olvidado… El miedo se ha instaurado en mi vida y en mi coraza hay ya una capa más… Apenas puedo con el peso de esta armadura que me estoy forjando y que debe protegerme del dolor que puede provocarme esta vida que me cuesta vivir, pero sé que, mientras continúe aquí, seguiré viviéndola con la cabeza bien alta…

Ahora no puedo permitirme que me hagan más daño. Ahora no debo permitirme sufrir más. Ahora no debo permitirme ser débil. Ahora sólo debo permitirme lo poco que va quedando de mí como persona…

Sé que ya no tengo paciencia. Quizás ya no tengo edad para ello… El tiempo, mi tiempo, se agota…

De nada vale contar con la esperanza de que un día todo va a cambiar…

Ya no volveré a pedir nada…

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He perdido tus palabras.
El abrazo simple y tierno de la madrugada…
He perdido la sonrisa que tú me dabas,
y la alegría de unas letras que esperaba…

He perdido lo poco que me quedaba…

El llanto desconsolado de un niño,
el amargo dolor de la distancia, sin esperanza…
Mis días sólo tienen horas que se pierden
mientras vago entre mis recuerdos…

He perdido la mirada cómplice…
He perdido las palabras de consuelo…

Y ahora te pienso sin querer pensarte…

¿Ya me has olvidado?

Si algo te ha molestado, quiero pedirte perdón...pero también quiero pedirte que no me ignores... No es una obsesión... Símplemente es porque te quiero y no me atrevo a decírtelo... Ya me he dado cuenta de que te quiero...

Miro con ojos manchados el gran vacío que me rodea... ¿Realmente importa si no puedo respirar?

¿Debo desaparecer?

Temo perderte... y no temo nada más...

Pregunta del día: ¿Ya me has olvidado?

"Me siento solo, mi alma se desvanece, y es que te amo tanto que el distanciamiento que sufrimos me apuñala cada noche más y me mata cada amanecer que paso si no te tengo..."

Y hoy siento frío...

Cuando más necesito oír su voz, cuando más necesito recibir un mensaje que no espero, cuando más necesito esa sonrisa…no aparece... Supongo que tendré que empezar a empaquetar todo esto y dártelo para que puedas volvérmelo a regalar…

Últimamente las palabras no salen de mi cabeza. Estoy un tanto anulado y colapsado. Hace algunos días que he dejado de escribir en mi libro, y eso solo ocurre cuando la confusión y la incertidumbre vuelven a habitar en mí… A veces me apetece irme lejos, muy lejos y comenzar de nuevo… Necesito algo que me pueda “atar” aquí, y ahora no tengo nada que realmente me retenga en esta vida que llevo…

Y hoy siento frío…

Y hoy ya no sé lo que necesito… ¿Un abrazo? ¿Un beso? ¿Una palabra?

Creo que ya no debo pedir nada…



“Quisiera quedarme contigo a solas, para decirte que podría amarte como te mereces, que podría entregarme a ti como quiero, que podría vivir y morir siempre junto a ti…

Quisiera quedarme contigo a solas, para mostrarte lo que puedo darte, para dejarme guiar por la alegría, para perderme en el inmenso universo de tu mirada…”

Miedo

Tengo miedo de perderte y no temo a nada más...

Ahora ese es mi único miedo...

Gracias, mi niña… Porque tus palabras de ayer me hicieron sonreír… Porque tus mensajes me llenaron de alegría y de esperanza…

Gracias, mi pequeña, porque ayer pude abrir, aún más, mis ojos a la esperanza y a la ilusión…

Gracias, porque te valoro, porque me da tiempo a echarte de menos…

Gracias, porque imagino un paseo a tu lado…

Gracias, porque sigues siendo tan especial…

Gracias, porque apareciste en mi vida…

Gracias…

Nunca puedo olvidarme de ti, y lo sabes… Estás presente en todos y cada no de mis pensamientos, esté donde esté y haga lo que haga… Es así y no quiero cambiarlo…

Y ayer, en la distancia, sentí tu abrazo…

Y ayer me hiciste feliz…